ÉTICA Y PERIODISMO

PALABRAS DE ORDEN DE INGRID GONZÁLEZ DE RODRIGUEZ,  EN LA ENTREGA DEL DOCTORADO HONORIS CAUSA, POR UTESA AL DOCTOR FERNANDO PÉREZ MEMÉN. Santiago, 3 de marzo de 2009.

Apreciados miembros de la mesa de honor, 

Autoridades de  Académica de Utesa

 Integrantes de la directiva del gran teatro del Cibao 

Autoridades civiles y militares

Apreciados colegas, 

Señoras y Señores 

En nombre de todo el personal del periódico La Información, y del mío propio, expreso nuestra satisfacción y alegría por la ceremonia de celebración del honor académico, que concede UTESA al doctor Fernando Pérez Memén. 

Les confieso que surge desde mi más profunda admiración y respeto, ponderar su meritoria labor de 12 años ininterrumpidos en LA INFORMACIÓN, edificando un periodismo apegado a la ética y los valores, fundamentado en ideas altruistas y acciones positivas, en armonía con la misión de LA INFORMACIÓN, que es servir a la familia dominicana, en el logro de sus más nobles metas.  

Una gran cantidad de amigos y amigas que le aprecian, unen sus voces en éste acto, para dar testimonio de la alta calidad de sus dones profesionales y humanos. 

Lo primero que debo decir es que el mundo que vivimos hoy, es ostensiblemente distinto al de apenas hace 3 décadas. En la actualidad un nuevo escenario histórico determinado por la transformación del orden social, político, económico y cultural abre las puertas a un nuevo panorama mundial, marcado por la crisis y el cambio. 

Observamos las actuales tendencias vinculadas al desarrollo de las comunicaciones, en coexistencia con las tendencias generales de las sociedades pos-modernas, marcadas por el ritmo rápido de la civilización técnica, que ha impactado de manera especial a los medios de comunicación. 

Los hallazgos científicos, las nuevas aplicaciones tecnológicas, los nuevos canales de recepción de la información, han transformado definitivamente la noticia y sus redes de difusión, todo ello ha implicado una redefinición del rol y la naturaleza de los medios y su impacto en la vida de las comunidades. 

Para los datos concretos tenemos las enciclopedias, los libros, y el Internet. La revolución tecnológica y el impacto de la comunicación vía satélite, junto a otras técnicas informáticas, han hecho posible la realidad de un mundo hiper- informado. 

El periódico tiene la tarea de informar, formar, interpretar, educar y entretener, de ahí que su función es fundamental, como actividad humana realizada en el contexto  histórico, dónde se desarrollan las relaciones sociales, la persona y la cultura.

Hoy más que nunca, se destaca el espacio de la prensa escrita, como ámbito de reflexión que pude ayudar a vencer la ignorancia, el totalitarismo, el autoritarismo, el dogmatismo y la opresión, que a veces se diluyen de la vista del público, no obstante, forman parte importante de las grandes problemáticas de un mundo en crisis. 

Precisamente en ésta época dónde triunfan los dioses del consumo y el mercado, impuestos por el materialismo instrumental, la pérdida de los valores y la cultura del relativismo -se extienden a la experiencia moral- como adaptación a las circunstancias o adecuación a los prejuicios. En este orden, la acción de los medios debe contribuir a una formación ciudadana comprometida con la educación y los valores. Integridad, solidaridad, responsabilidad, honestidad, compasión, entusiasmo, paz. La democracia y la justicia social, deben triunfar en las complejas sociedades modernas. 

Por todos lados la juventud recibe la propaganda de los anti- valores, relativismo y consumismo, van de la mano. Ofertas, datos, hiper- información, pero poca orientación y reflexión, el pensamiento crítico queda de lado, olvidado, en un mundo de oferta y demanda, dominado por el esquema del mercado.  

Hoy más que nunca, debe la acción de los medios abrir a las personas la posibilidad de acercarse a una comprensión del hombre y su mundo, combatiendo la ignorancia y forjando ideales humanísticos. 

En la actual sociedad del conocimiento el “a priori” de una ética aplicada al periodismo es una condición previa a la razón humana, su eficacia se prueba en la actualidad de los medios, dónde se hace urgente y necesaria la discusión de la credibilidad, del concepto de verdad en la noticia, del respeto a la dignidad humana al difundirla, del equilibrio, de la función en su articulación en la opinión pública. 

Los medios de comunicación tienen un rol que cumplir frente a una sociedad que espera de ellos profesionalismo, transparencia y confianza. Su postura es  insoslayable, al servicio de la verdad, el bien y la justicia. En estos valores creemos y a ellos nos entregamos con la mirada de nuestra fe en Dios. 

Muchas gracias

Dios les bendice